El TDAH se considera un trastorno neuropsiquiátrico, relacionado con una alteración del neurodesarrollo y constituye la entidad de mayor prevalencia del niño y del adolescente en la etapa escolar. Pero ¿sabías que este trastorno puede tener gran influencia sobre la calidad del sueño a largo plazo? Y no nos referimos únicamente al insomnio. De hecho, existen varios trastornos, tanto conductuales, como no conductuales del sueño que influyen en la mala calidad de este.
Debido a esta variedad clínica de las alteraciones del sueño, es que su relación con el TDAH es compleja, multifactorial y multidireccional. Es así como los niños con alteraciones del sueño, con un sueño inadecuado o una mala calidad del mismo, desarrollan síntomas semejantes al TDAH.
El síndrome de la fase del sueño retrasada (SFSR)
Este síndrome consiste en un trastorno del reloj biológico de las personas conocido como ritmo circadiano. Este reloj es el que nos ayuda a regular nuestros horarios de sueño, en base a la presencia y ausencia de luz. El hecho de que este se vea afectado implica, no solo el desfase del horario de sueño, sino también la alteración del ritmo de la temperatura corporal, el nivel de atención y concentración del individuo, el ritmo hormonal y otros ritmos biológicos cotidianos, comparados con los estándares de la población general.
Existe una alta proporción de personas con TDAH que padecen SFSR y hay estudios que han demostrado que existen genes polimórficos relacionados con ambas patologías.
¿Cómo es la vida de las personas que padecen este trastorno?
Las personas que padecen de este síndrome suelen tener un sueño muy ligero al momento de irse a dormir y un sueño muy profundo al momento de levantarse, lo que provoca que se les haga muy complicado escuchar la alarma del despertador. Este síndrome no afecta la hora en la que el individuo se va a acostar, pero en definitiva repercute negativamente en el estado en el que se encuentra la persona a lo largo del día. Esto quiere decir que las personas con SFSR suelen tener una sensación de agotamiento durante la mayor parte de la mañana, o incluso, la mayor parte del día.
Es por ello que las personas que padecen el SFSR tienden a ser trabajadores nocturnos de forma voluntaria, pues se sienten más despiertos, creativos y funcionales durante la tarde y la noche. Los pacientes con este síndrome simplemente no pueden forzarse a dormir antes, ya que estarán dando vueltas en la cama sin poder conciliar el sueño.
Existen múltiples tratamientos que se les recomienda a las personas con esta afección. Una de ellas es la realización de una higiene del sueño mediante la cual se busque mantener un horario regular para dormir, evitando consumir cafeína o realizar actividades estimulantes cerca de la hora de acostarse. Sin embargo, también se pueden recetar suplementos a base de melatonina para ajustar el reloj interno, o hasta recomendar la realización de fototerapia o cronoterapia. ¿Te sientes identificado con la descripción que hemos dado y crees necesitar alguno de estos tratamientos? no dudes en contactarnos. En INA contamos con los mejores profesionales y tecnología de punta para efectuar un diagnóstico certero.
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